UNA INESPERADA BIENVENIDA (cap. 1)

Tal vez no fue mala idea venir aquí… el clima me puede ayudar. Eso era lo que pensaba para ayudarme a continuar, hace semanas que no pienso en eso y no se si este funcionando pero irme de ahí hizo que mi mente se despejara un poco.

Continúe caminando disfrutando el paisaje, jamás había estado aquí, el solo lo había mencionado una vez pero no vine aquí por eso, vine por que nadie me conoce, empezar desde cero era lo único que me animaba a no correr y esconderme en una cueva.

Tal vez podría quedarme aquí, el pueblo se veía tranquilo y apuesto que sería fácil conseguir empleo, no se por qué los humanos no podían decirle que no a esta cara, si supieran que es una máscara.

Un ruido hizo que volteara, no había nadie, solo un bosque carente de sol; cuando decidí seguir un hombre alto y rubio estaba frente a mí, si no supiera la verdad creería que era un ángel, de pronto, apareció otro, este era distinto, era musculoso y juraría que si me lo hubiera encontrado antes estaría temblando de miedo, pero las cosas cambian.

Ellos me observaban como confirmando que era yo.

-Tu eres Madeleine ¿verdad?-dijo el rubio
-Si-me puse en guardia- y ¿tu quien eres?
-Me llamo Jasper… Jasper Cullen y el es mi hermano Emmett-no lo podía creer ¡Eran ellos! En seguida relaje mi postura.
-¿Por qué saben mi nombre?
-Alice nos dijo que te íbamos a encontrar aquí-explico Emmett, poniendo los ojos en blanco.
-Ven con nosotros, Carlisle esta en camino, se quiere conocerte
-No creo que sea buena idea, yo... solo estoy de paso
-¿Así? La verdad no creo que tengas algo mejor que hacer-dijo Emmett

Era cierto, mi vida había perdido el sentido desde hace tiempo y ahora vagaba en busca de consuelo, aunque sabía que no existía para mí

-Esta bien, iré con ustedes, yo también quiero conocer a la famosa familia Cullen

-¿Famosa?-la voz de Emmett sonaba sorprendida

-Si, he conocido a algunos que los han mencionado, la verdad que me sorprende que ustedes hayan detenido a un ejército de neófitos sin ayuda

-La verdad... es que nos ayudaron

-¡Oh! eso le quita lo extraordinario

-Bueno es mejor que lleguemos pronto a casa, todos deben estar ansiosos- Jasper dio media vuelta y comenzó a correr, volteé a ver a Emmett y él sonreía como invitándome a correr

En unos segundo iba siguiendo a Jasper a través del bosque, la verdad aun tenia mis dudas, ¿para qué me querían conocer? ¿qué tenía de interesante una neófita como yo?

Podía escuchar a Emmett tras de mí, aunque sabía que no me iba a hacer nada era obvio que habían mandado a los más fuertes, era de todos sabido lo que Jasper sabía de combate y lo fuerte y letal que es Emmett.

Después de unos cuantos minutos vi como Jasper saltaba un río, así que lo seguí y al caer pude ver frente a mi una casa blanca. El se dirigió a la casa y entró.
-Es bonita ¿verdad?- era Emmett el que preguntaba
-Si- se me había hecho un nudo en la garganta, me recordaba tanto a mi anterior casa
-Ven, todos están ansiosos de verte, sobretodo Esme
-¿Esme?
-Si, ella es como nuestra madre, anda ven no los hagas esperar.

Lo seguí y al entrar estaba en la sala siete vampiros, pero a diferencia de los vampiros que había visto en una ocasión ellos tenían los ojos amarillos y no rojo sangre.
Mientras miraba los rostros de la familia trataba de adivinar quien era quien, la rubia debía ser Rosalie
-Hola Madeleine, yo soy Alice- en verdad era linda como me la habían descrito, era un poco más pequeña que yo- ellos son Rosalie -había atinado, si era la rubia- Bella, Edward, Esme y obvio ya conoces a estos dos- corrió a lado de Jasper.
-Hola- en verdad era incomodo, no sabía que querían de mí

-Espera a que llegue Carlisle, el quiere estar presente- me respondió Edward, en verdad era guapo, pero lo de su poder de leer las mentes me asustaba un poco- ¿por qué no te sientas mientras esperamos?
-No es necesario Edward ya estoy aquí
Volteé y vi a un hombre con bata de doctor, se dirigió hacia mi y me extendió la mano, yo se la estreche con miedo.
-Soy Carlisle Cullen, bienvenida Madeleine Hitchcock.
-Gracias, pero no entiendo ¿por qué me estaban esperando? ¿qué quieren de mi?
-Se que debe ser confuso pero sabemos que estas sola, Alice lo vio hace poco en sus visiones.
-Sigo sin entender-di un paso hacia la puerta
Jasper se me acercó y de pronto todas las preocupaciones parecieron calmarse
-Se que estas sola, se muy bien como se siente eso, permiteme ayudarte, se que tienes miedo, puedo sentirlo, también siento tu confusión pero nosotros podríamos ser quienes te ayuden, podemos ser tu familia... solo si tú quieres.
La verdad es que me sentía sola, a lo mejor era buena idea quedarme, después de todo no tenia a donde ir, no se que me pasaba ellos parecían que en verdad querían que me quedara.
-Esta bien, se los agradezco mucho, espero no ser una molestia
-No digas eso-Alice me tomó de la mano y me llevó escaleras arriba- ven, te voy a mostrar tu cuarto
-¿Esperaban que aceptara?
-Había una gran probabilidad, así como la de que nos atacaras- soltó una risita
-No soy tonta, no podría atacarlos y salir viva de esta
Subimos dos pisos y al fin me llevo frente a una puerta.
-Espero te guste como lo decoramos- abrió la puerta y al entrar me quedé sorprendida, era un cuarto muy espacioso, tenía una pared de cristal, y un armario muy grande, estaba cubierto con una alfombra, tenia un estante vacío y junto a el había un estéreo.
En seguida me sentí como en casa.