SEPARACION (cap. 16)

-¿Jasper?-susurre, el estaba tendido a mi lado en la alfombra de mi cuarto, ya era de noche, la pelea me habia dejado cansada.
-¿Si?
-¿Qué tal si nos vamos de aquí?-solté- piénsalo podríamos encontrar un lugar apropiado para pelear y así ningún humano saldría herido.
-Madeleine, puedo sentir el miedo que tienes, se que no quieres que le pase algo a Jacob, pero tu idea es buena, no se que opinen los demás
-Ojala acepten, no me perdonaría que le pasara algo a Jake o a sus hermanos.
-Tranquila, vas a ver que saldremos de esta, vas a ver qué…

Un estallido proveniente del bosque lo interrumpió, nos asomamos y vimos como los arboles salían volando, una enorme masa de fuego devoraba muchos arboles. Era tarde, ya estaban de vuelta.
Abri mi ventana y nos arrojamos, corrimos bosque adentro, en unos segundos toda mi familia estaba a mi lado, lista para una segunda pelea. Ojala sea como la anterior, rogué.
A los pocos instantes una chica de aproximadamente catorce años se lanzo sobre mi pero la logre detener a tiempo, era muy hábil y me costaba seguirle el paso. Estaba a punto de golpearla cuando un grito sobresalió entre la multitud, pedían refuerzos, y nosotros que apenas podíamos con ellos. Como pude la decapite, también le arranque los brazos y las piernas.
Al poco rato un grupo de veinte llego al lugar y relevo a los que habían caído ya, era una tarea difícil de terminar. Todas las esperanzas que tenía se desmoronaron en un segundo al ver a los recién llegados.
De pronto se aparecieron frente a mi unos gemelos, y me atacaron al mismo tiempo y por poco uno me atrapa, hasta que Gerard se materializo de la nada, normalmente odiaba su poder, pero ahora estaba agradecida.

-¿Necesitas ayuda?
-Todos la necesitamos-contesté mientras esquivaba un golpe
-Qué bueno que nos complementamos, al menos en esto-dijo mientras sonreía

Tener a alguien cuidándote la espalda era práctico. En un abrir y cerrar de ojos lanzo a uno lejos. Después de deshacernos del otro nos lanzamos sobre una pareja que estaba dirigiéndose a Alice, fue fácil entre los dos. Pero aun así no era suficiente. Lo comprendí cuando escuche la voz de Emmett gritando que nos retiráramos. Trate de buscar a Jacob pero al parecer ellos no habían estado en la pelea. Al menos estaban a salvo en la Push.
Luego empecé a buscar a mis hermanos y hermanas pero el caos era tremendo, no los veía. Solo habia fuego, mucho humo y gritos.

-¡Vámonos Madeleine! -gritaba Gerard, me tomo de la mano y desaparecimos del lugar.

Llegamos a una pequeña ciudad a las afueras de Belleville en New Jersey, estaba nublado, en seguida fuimos a buscar un lugar donde quedarnos, y lo encontramos después de caminar un rato. Era un modesto hotel pero agradable. Al llegar a nuestra habitación decidí distraerme un rato antes de ponerme a pensar cuál sería mi siguiente movimiento así que encendí la tele, mientras estaba buscando un canal decente me quede helada al ver en las noticias el escenario del que apenas había logrado salir. Informaban de la pelea, al parecer el secreto de mi raza habia salido a la luz, los vampiros sobrevivientes se mostraron tal cual ante los bomberos que llegaron a apagar el fuego, nadie de esos bomberos habria sobrevivido, solo una grabacion de como los mataban. El reportero agrego que al final del video, el lider de ese grupo advertia que esto era el inicio.

-Esto es un asco- murmure y apagué la tele- tengo que regresar a Forks.
-Pero si acabamos de salir de ahí
-Sí, pero ¿Qué no entiendes? Mi familia podría necesitarme
-Mejor esperamos un poco, por lo que veo, esto se va a poner un poco más difícil, ¿Cómo sabes que no nos andan buscando? Ademas yo creo que tu familia logro escapar.
-De acuerdo, esperare. Por cierto no te he dado las gracias por salvarme
-No hay de que-su sonrisa que siempre me había gustado apareció en su rostro- una vez te dije que no permitiría que algo malo te pasara, y a pesar de todo lo que te hice esa promesa la quiero cumplir
-Gracias- le devolví la sonrisa

Al atardecer salimos a dar una vuelta, odiábamos estar encerrados, pero nos llevamos una desagradable sorpresa, parecía como si la alegría se hubiera esfumado y en su lugar existía una atmosfera de tensión, encontramos en nuestro camino a dos comisiones que estaban haciendo una especie de censo, en una casa encontraron lo que querían era una bebé de apenas unos ocho meses, y sin ninguna consideración la arrancaron de los brazos de su madre.

-¿Sientes lo mismo que yo?-murmuro una vampira morena a su compañero- esta niña tiene un gran potencial

Cuando se alejaban la madre se aferro a las piernas de la mujer tratando de detenerla, pero su compañero la levanto y la arrojo contra la pared de la cual ya no se levanto. La bebé comenzó a llorar mientras ellos se desaparecían del lugar.
Me acerque a auxiliar a la madre pero esta no tenía pulso, el golpe había sido muy fuerte para un humano indefenso.

-¿Y ahora qué?
-No se… yo no puedo quedarme viendo como sufren las personas, no es justo- dije mientras revisaba un periódico que alguien había tirado a la basura
-Pero ese no es nuestro problema…
-Sí lo es, ellos no pueden detener algo tan grande como un ejército de vampiros dirigidos por un demente con hambre de poder, no se cual sea tu decisión Gerard pero yo voy a pelear
-Eso es una locura Mad, es un suicidio
-Gerard, suicidio es cuando alguien quiere morir, por si no recuerdas yo ya estoy muerta, y aun tengo la oportunidad de arreglar algo- reflexione mientras sonreía, pero cambie mi rostro a uno más serio- pero si tú no quieres ayudar no te obligo, respetare tu decisión, a pesar de todo te tengo cariño
-No se…
-Pues mientras lo piensas yo empezare a buscar formas para ayudar a las personas, si en algún momento quieres ayudar, solo búscame- le di un beso en la mejilla mientras me alejaba corriendo por callejones.

Los meses siguientes me dedique a ayudar a las pocas personas que se dejaron, algunas creían que era un agente que solo iba a capturarlos como víctimas, otros si me dejaron ayudarles hasta cierto punto, la gente me tenía miedo.
Por mas que busqué no encontré rastro de Jake ni de sus hermanos ni de mi familia, eso era preocupante.